La delincuencia en Lima

¿Cuándo fue la última vez que te sentiste seguro/a cuando saliste de tu casa? No recuerdo ninguna época de mi vida en la que salir haya representado un  peligro para cualquiera, desde niños hasta adultos. Nos hemos acostumbrado a vivir así, con miedo a que nos roben o agredan en cualquier punto de la ciudad, hasta en los lugares más concurridos y supuestamente más seguros, pues ya ni siquiera estar cerca a una comisaria es signo de seguridad. Prendemos la televisión, ponemos el noticiero y ¿qué es lo primero que vemos?: robos, secuestros, asesinatos; no hay día que pase que no ocurra algún delito, y tan solo agradecemos que no haya sido ninguno de nuestros seres queridos, y esperamos no ser los siguientes. La delincuencia en Lima es uno de los principales y además crecientes problemas en nuestro país, sin embargo, las autoridades no toman las medidas suficientes para poder parar esta ola de violencia e inseguridad que estamos viviendo. Para empezar, definiremos que es delincuencia o qué entendemos por esto.

La delincuencia es la cualidad de delincuente o la acción de delinquir. El delincuente es quien delinque; es decir, quien comete delito (un quebrantamiento de la ley).  La delincuencia, por lo tanto, está vinculada a las personas que violan las leyes y al conjunto de los delitos. Al implicar conductas antijurídicas (contrarias al derecho), a la delincuencia le corresponde un castigo según lo estipulado por la ley. Esta pena dependerá del tipo de delito cometido. La lucha contra la delincuencia supone una parte importante de las políticas de Estado ya que su accionar viola los derechos de los ciudadanos. En todas partes del mundo, pero especialmente en las grandes ciudades, la delincuencia se cobra miles de vidas al año, lo que convierte a este problema en una de las principales preocupaciones sociales.

Actualmente, es  preocupante el índice de delincuencia en nuestra capital, ya que en los últimos años se ha convertido en el principal problema del país, y parece las autoridades no toman suficientes medidas en el asunto o sus planes de acción no son lo suficientemente eficientes. Para poder tener un mejor enfoque de este problema, debemos primero centrarnos en las causas, en la raíz del problema, para así poder entenderlo mejor y poder, de estar a nuestro alcance, poner nuestro grano de arena en la lucha contra este.

Primero, contamos con una policía nacional que no cuenta con las herramientas necesarias para llevar a cabo su trabajo, y sumándole a esto una mala paga, caen fácilmente ante la coima y la corrupción. Además, en conjunto con esta situación, la mala imagen que se ha formado de ellos ha hecho que pierdan prestigio, y con este la motivación. La finalidad de la policía es, o debería ser, garantizar, mantener y restablecer el orden interno, presta protección y ayuda a las personas y a la comunidad, garantiza el cumplimiento de las leyes y la seguridad del patrimonio público y del privado, y por ultimo previene, investiga y combate la delincuencia. La policía debería ser una entidad respetada y querida por la sociedad, y un símbolo de seguridad; pero esa no es la realidad en nuestra capital, lo cual debe cambiar.

También tenemos al Ministerio de Justicia y al Poder Judicial. Ambas entidades se encargan de la formulación y cumplimiento de leyes, y también de las penas impuestas a los criminales. Para empezar, las leyes en nuestro país no son lo suficientemente severas o adecuadas para enviar el mensaje de cambio a los delincuentes, y además muchas de ellas son contradictorias o confusas o existen lagunas jurídicas, lo cual permite que los abogados encargados de la defensa puedan usar esto a su favor y disminuir o eliminar la pena de acusados culpables. Por otro lado, el hecho de que la corrupción haya llegado al poder judicial le quita seriedad a los procesos. Nuestro sistema judicial, además de tener leyes inconcretas, poco severas y confusas; es sumamente corrupto, teniendo como consecuencia que quien tiene los medios económicos puede infringir cuantas leyes quiera. Además, la prisión debería ser una institución dedicada a reeducar a los convictos para que al salir puedan reintegrarse en la sociedad; sin embargo, en nuestro país ir a la cárcel significa una experiencia traumática donde la mayoría de presos salen siendo personas incluso más peligrosas de lo que eran antes.

Existen muchos factores en el Perú que llevan a los ciudadanos a caer en la delincuencia. Entre ellas están el desempleo, la pobreza, el mal sistema educativo estatal, la ausencia de un gobierno con planes asistencialistas, mala formación en casa. Todos estos llevan a muchas personas a pensar que es la fuente de ingreso más fácil y rápida, la única opción que tienen para poder mantenerse o mantener a sus familias, o ganar el respeto o miedo de los demás (pandillas). Debemos ser conscientes que las falencias y problemas sociales en nuestro país son la principal causa de la delincuencia. Muchos no lo entienden y consideran como inadaptados por elección a los delincuentes, pero debemos tener en cuenta que la realidad peruana es cruda, que gran parte de la población vive en condiciones infrahumanas, debido a la pobreza. La verdad es que muchos de los ciudadanos que caen en este terrible estilo de vida, fue al comienzo a causa de desesperación, lo cual por supuesto no es una justificación, pero es un hecho que todos los peruanos deberíamos querer cambiar.

Además, las personas deberían tomar las precauciones necesarias para su seguridad, pero con el fin de ahorrar dinero, no utilizan las diversas maneras de seguridad que hay como los cercos eléctricos, las alarmas, rejas, seguros para puertas, e incluso contratar el servicio de un guardián. A pesar de los constantes sondeos y las noticias, no son conscientes de la situación actual y ven el estado de alerta como una realidad lejana. Muchas veces, uno piensa que nunca le va a pasar, a pesar de escuchar historias y ver en las noticias los numerosos casos de delincuencia, creemos ilusamente que las probabilidades de que nos pase a nosotros son mínimas, y por ello no tomamos las medidas necesarias para prevenirlo. Sobre todo los jóvenes son quienes cometen los actos más irresponsables, por ello los padres deberían ser más estrictos con ellos y enseñarles los peligros que existen allá afuera. Como podemos ver, esta creciente problemática es fruto de un conjunto de malas decisiones y planes del estado, que mezclando una ineficiente policía nacional, con un poder judicial corrupto y la constante y alta pobreza; la obvia respuesta de la población ha sido caer en la delincuencia.

Todos podemos ayudar en algo para detener esto, por ello ahora que el problema está planteado y entendido, debemos buscar la mayoría cantidad de soluciones posibles, desde aquellas que estén al alcance de cada limeño hasta las que requieren un poco más de poder e influencia para poder llevarlas a cabo. No podemos quedarnos de brazos cruzados  y esperar que las autoridades competentes se hagan cargo, porque al final todos se lavan las manos y nadie se hace responsable. Hay muchas cosas que nosotros podemos hacer para ayudar a mejorar en este tema.  Ir a la comisaria y hacer una denuncia, es una de ellas. Ya sea por un caso personal o externo, el último solo si la otra persona no ha hecho la denuncia, presentar una queja formal es muy importante ya que ayuda a formar un historial. En caso se reconozca al culpable, se tiene agravantes en su contra para el momento de su captura; y en caso no se reconozca, se archivara y quizá más adelante hayan coincidencias relevantes que ayuden a reconocerlo. Esto ayuda a que el crimen no quede impune. Podemos promover entre familiares y amistades la importancia de tomar las precauciones necesarias, generar una corriente de concientización al respecto. Evitar las situaciones peligrosas y ser prudentes y discretos, son la clave. Ayudar a difundir casos que sepamos de situaciones similares, cuando vivimos las cosas más de cerca se nos es más fácil interiorizarlas. También es importante enseñar con el ejemplo, los padres deben educar a sus hijos con responsabilidad y valores, para que ellos también puedan difundirlos entre sus amigos y conocidos. La municipalidad tiene la responsabilidad de velar por la seguridad ciudadana, así que pedir al municipio la presencia de policías en zonas o espacios públicos que presenten actos de delincuencia reiterados, más que un derecho, es un deber. Nosotros mismos tenemos que exigir que se cumplan nuestros derechos, y velar por que se hagan efectivas las ordenanzas municipales. La presencia constante del Serenazgo en el distrito ayudara mucho a disminuir la delincuencia en la zona. Ya que una de las causas principales está situada en la formación de los ciudadanos, tanto académica como moral; una solución que sería eficiente pero a largo plazo seria cambiar la formación de los limeños desde pequeños. Se podría pedir al municipio que organice charlas en los colegios del estado que fomenten los principios morales y el desarrollo de la conciencia. Así, cuando estos niños y jóvenes alcancen la edad adulta y tengan que valerse por sí mismos, no consideraran la delincuencia como un estilo de vida. Y aunque esta solución no tenga un resultado visible inmediato, a largo plazo será el que mejores resultados tenga, y también solucione otras problemáticas, como conciencia social y ambiental, crecimiento cultural y mejor nivel educativo. Y si bien es cierto que atacar al problema de raíz es una buena estrategia, también debemos prestar atención a aquellos que han caído en la delincuencia y luego supuestamente tienen una oportunidad para reinsertarse en la sociedad. Debemos permitir que aquellos que han delinquido, puedan cambiar de estilo de vida, y no tener como única opción después de salir de la cárcel volver a lo mismo. Entonces, sabiendo que para disminuir la delincuencia no solo debemos evitar que más jóvenes caigan en esto, sino también abrirle las puertas a quienes ya han caído y ayudarlos a levantarse, dándole las mismas oportunidades que a cualquier otro ciudadano y no siendo excluyente o discriminante. Es comprensible que esta alternativa no sea tan factible, pues los pobladores limeños se han vuelto muy desconfiados con la situación de inseguridad que ahora estamos viviendo. Depende de cada uno de nosotros darle una segunda oportunidad a quienes se lo merecen, pues todos necesitamos ayuda en algún momento de nuestras vidas y negársela a aquellos que quieren un nuevo comienzo es como no dejarlos crecer y convertirse en mejores personas.

Por último, formular leyes y hacer que se lleven a cabo de manera limpia y correcta es una cuestión del Ministerio de Justicia, el Congreso y el Poder Judicial; pero también es cierto que el estado está a disposición de la población, y nadie le puede quitar el poder de opinión y consejo. Por ello, nunca está de más requerir nuevas leyes o leyes más estrictas en la Constitución. El gobierno debería hacer algo seriamente al respecto, pues sin un sistema judicial funcional, las penitencias no serán las adecuadas y la seguridad ciudadana nunca podrá ser la optima. Entonces, lo que muchos se preguntaran es: ¿Es posible acabar con la delincuencia en Lima? Es sumamente difícil pero no imposible. También es cierto que es utópico pensar que puede existir una ciudad con 0% de delincuencia, pues es una realidad que siempre existirá en la sociedad, pero si es posible reducirla al mínimo. Es posible tener la oportunidad de salir tranquilo a las calles de Lima y sentirse seguro, es posible lograr que las noticias no sean mayormente actos delincuentes, es posible confiar que nuestros seres queridos están protegidos  al estar fuera. Todo esto es más que posible, pero tenemos que avanzar, trabajar y crecer juntos como ciudad para poder mejorar el estilo de vida en Lima. Pues no es posible que la capital de uno de los países con más riquezas culturales y diversidad en el mundo, siga teniendo un índice de delincuencia tan alto como el actual. Está en nuestras manos cambiar, solo tenemos que trabajar en ello.

Autores: Claudia Fernández, María Luisa Loli, Mariafé Noriega

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7 respuestas a La delincuencia en Lima

  1. ds18udep dijo:

    Sin duda cada día la delincuencia esta presente en artículos de periódicos , noticia en radio y televisión.
    Pero creo que solo promulgar leyes no ayudara a que mejore, se deben dan trabajos comunitarios a estas personas que roban por mas pequeño que sea el monto robado.
    En vez de promulgar leyes, deben existir proyectos para mejorar la ciudadanía trabajar en conjunto, denunciar por las redes sociales a los delincuentes, facilitar el trabajo de la policía.
    El día de ayer al pasar por el distrito del Callao me di cuenta de la situación crítica que se vive en ese distrito. Muchas personas viven alejadas de esa realidad, pero es increíble que un policía no pueda disparar a un delincuente en defensa propia porque se va a la cárcel!!
    Si las leyes fueran distintas y se protege a quien cuida de la ciudad, estoy segura que los policías actuaria de otra manera y quizás sea mas efectivo su trabajo.
    Debemos tener en cuenta que el sueldo de los policías es denigrante a comparación de otros países, ¿Darías tu vida por un sueldo que no cubre las necesidades básicas de tu familia?… yo no lo creo.

    Solange Corzo Salas

  2. ds18udep dijo:

    El tema de la delincuencia en la actualidad es muy delicado, pues de alguno u otra manera nos afecta a todos día a día. Me parece que dar solución a este problema es muy complejo, pues tiene varios factores que influyen en su aparición, por mi parte diría que es un problema de estructura y que se daría una solución si es que se actúa sobre todos los elementos que actúan en ella.

    Diego Revilla

  3. ds13udep dijo:

    El tema de la delincuencia en la cuidad es un problema que se ve todos los días, por lo que en mi opinión el Estado tiene que poner mano dura y plantear nuevos proyectos que ayuden a que la cuidad sea más segura. La familia y los valores que se forman dentro de ella también tienen que trabajar en paralelo, ya que los padres inculcan los valores que se desarrollaran en el futuro de sus hijos (como lo mencionaron en su trabajo). Por otro lado, el poner medios de seguridad para nuestras casas como: alarmas, rejas o contratar a personal de seguridad (como mencionaron en su trabajo) es un poco caro para algunas familias que no tienen los mismos recursos que tenemos mucho de nosotros por lo que deberíamos pensar en alternativas que estén al alcance de todos. Estoy totalmente de acuerdo con ustedes y es una pena que nuestro país este en pleno desarrollo y que el porcentaje de la delincuencia también este aumentado, esperemos en que el Estado y las municipalidades de los diferente distritos se preocupen más sobre este tema y que la PNP se dé cuenta de lo mal que hace recibiendo coimas y el mal ejemplo que da a la juventud.
    Buen trabajo chicas!

    Stephany Torres

  4. ds25udep dijo:

    Este tema de la delincuencia ya se nos ha vuelto parte de la rutina del día a día; si no nos enteramos de este por las noticias, es porque alguien nos cuenta que lo han asaltado, que le han robado el celular o la cartera y, tememos que uno de estos días, a nosotros también nos llegue a suceder. Y así, no podemos estar tranquilos y nos privamos de algunas necesidades, por así decirlo; no contestamos el celular en la calle, no usamos joyas, entre otras cosas. Es un tema de limitación, de restricción y, como ya han mencionado, para que éste acabe o se disminuya en gran medida, no se trata solo de promulgar leyes sino de realizar planes, proyectos que incentiven la práctica de valores, que enseñen las graves consecuencias que este acto trae; de esta manera, podremos hacer que más personas tomen consciencia y así, lograremos una mejor calidad de vida para todos.

    Valeria Naldos.

  5. ds30udep dijo:

    Es importante diferenciar los tipos de delincuencia pues no es lo mismo el crimen o delincuencia organizada que se caracteriza por grupos estructurados que planifican la «ejecución limpia» de asaltos, secuestros y extorsión de la típica delincuencia que encontramos en las calles de Lima que por cierto es la más frecuente y a la que estaríamos más expuestos como ciudadanos.
    En gran medida los medios de comunicación juegan un rol importante pues son ellos los responsables de informarnos, aunque también de crear esta atmósfera de inseguridad la cual podría estar sobreestimada (por la excesiva polémica, i.e crímenes que están en los noticieros por semanas ) por esto es importante denunciar todo tipo de actos para que el Estado informe con la transparencia adecuada. Un tema muy interesante.
    Carlos Sejuro

  6. anvini paes dijo:

    Hola, que tanto estudio de la delincuencia en Peru, esto se arregla cambiando leyes obsoletas dando mejor sueldo a la policia peruana, darles un mes a los delincuentes para entregar sus armas y depués a los que no lo hacen capturarlos y enviarlos a trabajar en la Selva construyendo vias de cominicación, deluincuentes extranjeros a su país inmediatamente, etc.,pero hacerlo…….ya……

  7. Estamos llegando a un extremo de impotencia por la pasividad de las autoridades, de tal manera que los ciudadanos nos vamos a ver obligados a proceder también con violencia ante la delincuencia, aplicando la Ley del Talión para preservar instintivamente nuestra integridad. Caso contrario, tendremos que esperar como mansos corderos que el lobo nos coma cada vez que tiene hambre.

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